El Xerez hizo sufrir al Barça de Pep Guardiola. Los azulinos plantaron cara durante los 90 minutos pero, como siempre, la falta de puntería condenó a los azulinos. Henry al principio de la segunda parte e Ibrahimovic al final del partido certificaron la victoria blaugrana.
Ambos conjuntos salieron con las alineaciones previstas y el partido empezó con un grandísimo ambiente en la grada. Guardiola, como se preveía, pecó de excenso de confianza y puso un equipo titular plagado de suplentes. Durante los primeros minutos, el Barça no encontraba su forma de jugar. El Xerez presionaba con sentido y defendía con seguridad y, salvo dos jugadas aisladas de Bojan, el Barça no pudo apenas crear peligro. Además, el Xerez se acercó en varias ocasiones a la meta de Víctor Valdés e inclusco gozó de una buena ocasión de peligro tras un buen disparo desde la frontal de Alex Bergantiños, de los mejores hoy.
Durante todo el partido, el Barça estuvo muy espeso. Xavi y Keita no encontraban su sitio en el campo debido al acoso permanente de Bergantiños y Keita. Además, Márquez y Chygrynskyi se complicaban mucho a la hora de sacar la pelota y, por ello, el Barça no fue ese Barça arrollador al que estamos acostumbrados. Con el 0-0 en el marcador y con un Barça desconocido, nos marchamos al descanso.
En la reanudación, pasó lo que nadie quería. El Xerez salió algo despistado y al minuto de la segunda parte, Maxwell se colaba por la banda izquierda y su centre lo remató en el primer palo Henry. El equipo catalán se adelantaba en el marcador sin haber hecho nada. Poco después, Guardiola, viendo que el Xerez se fue en busca del empate, metió a Messi por un desaparecido Pedrito. El astro argentino estrenaba Balón de Oro en Chapín y con su entrada en el campo, Guardiola quería evitar que el Xerez se echara muy arriba. Con el paso de los minutos, el Xerez se lo fue creyendo poco a poco y empezó a gozar de ocasiones. Orellana tuvo en sus botas el empate pero su buen disparo lo atrapó Víctor Valdés. Poco después, Víctor Sánchez se coló por la banda derecha pero su centro no fue rematado por poco. Además, el Xerez conseguía meter al Barça en su área en los últimos 15 minutos con un par de córners que metieron el miedo en el cuerpo a toda la parroquia blaugrana.
Cuando el partido moría, en el minuto 92, Messi se aliaba con Ibrahimovic y el sueco no falló delante de Renán y puso el 0-2 definitivo tras picar la pelota por encima de Renán. Un gol precioso para cerrar un partido en el que todos los xerecistas nos fuimos, a pesar de la derrota, con una buena sensación tras haber visto como nuestro equipo había plantado cara y puesto en apuros al mejor equipo del mundo.
Otra jornada más y otros tres puntos que se escapan. El partido importante de esta semana es el del sábado. Los azulinos tienen que salir con la misma moral que hoy frente al Atlético porque en ese partido va la vida. El Xerez está muy bien defensivamente y a Ziganda ahora le queda la díficil tarea de hacer que su equipo haga ocasiones y, lo más importante, las materialice. El fútbol es lo único que vale en en fútbol y el Xerez en 13 partidos solo ha marcado 4 goles y es imprescindible que esto cambie lo antes posible. Ahora vienen dos partidos cruciales para el devenir xerecista y hay que sacar, al menos, cuatro puntos.
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