El Xerez Deportivo volvió a perder en la noche de ayer frente al Nástic de Tarragona y ya acumula cuatro derrotas consecutivas. El conjunto azulino tuvo un comienzo esperanzador y a los 10 minutos de partido ya iba por delante en el marcador pero al cuarto de hora el equipo xerecista se diluyó en el partido, se dejó remontar el partido y no fue capaz de reaccionar. Con esta cuarta derrota, el Xerez se queda ahora décimo a 3 puntos de los puestos de play off.
Javi López dejó de nuevo a Moreno en el banquillo, apostó por Lombán y Gioda en el centro de la defensa y eligió a Font como pareja de baile de Bruno Herrero. Un Bruno que hoy volvió a pedir a gritos la suplencia. El mediocentro azulino no funciona, no apareció en todo el partido y está en una baja forma que su equipo está acusando en demasía. Además, Font fue de más a menos y prácticamente no entró en contacto con el balón.
En los primeros minutos, el Xerez salió enchufado, metido en el partido y con las ideas claras. Óscar Díaz tuvo dos claras ocasiones de gol con sendos disparos desde fuera del área. Y a la tercera llegó la vencida. Córner botado por Capi, Leandro se encuentra con el balón suelto en el área y le pega mal pero su disparo encuentra a Óscar Díaz que solo tiene que empujarla. Corría el minuto 11 de partido y el Xerez ya iba por delante del marcador y, tras lo visto, todo parecía indicar que la mala racha azulina iba a acabar.
Pero no fue así. El Xerez, tras el gol, bajó el ritmo y dio pie a que si rival creciera en el encuentro. El Nástic empezó a hacerse dueño del partido poco a poco pero el Xerez no sufría. El partido entró en una fase de absoluta pasividad en la que ni xerecistas ni tarraconenses gozaban de ocasiones. Por desgracia, el Xerez se convirtió en el equipo más pasivo y lo acabó pagando muy caro. En los minutos finales del partido, el Nástic empezó a cercar la portería de Chema y consiguió llevarse su premio a falta de un minuto para el descanso cuando Powel puso el 1-1 en el marcador tras aprovechar un grave fallo defensivo azulino. Por enésima vez, el conjunto azulino cometía un error de bulto en el marcaje de una jugada a balón parado y se iba al descanso con el empate en el marcador y el "run run" en la grada.
En la reanudación, se vio claramente que el gol de Powel había hecho mucho daño al Xerez. Los jugadores azulinos se mostraron incapaces de reaccionar ante las adversidades y estaban totalmente noqueados. El conjunto azulino no daba señales de vida cuando llegó el segundo gol del Nástic. Felipe aprovecha el pasillo que le regala Llorente y, tras pisar área, puso el balón en la escuadra derecha de Chema con un gran zapatazo. Era el minuto 55 y todavía quedaba tiempo para, al menos, empatar.
Pero el Xerez no fue capaz de reaccionar y ni la entrada de Antoñito ni de Capdevila consiguieron reanimar a un equipo en crisis, plano, sin ideas e incapaz de tirar a puerta en los últimos 35 minutos. Así es imposible. El Xerez se mostró ayer sin espíritu y cometió, de nuevo, graves errores que le acabaron costando la derrota. Cabe destacar que el Xerez, ganando el partido se dedicó a jugar al pelotazo, y en los últimos minutos del encuentro, con el resultado en contra, intentó hilbanar jugadas. Las ocasiones brillaron por su ausencia y el Xerez encadenó su cuarta derrota consecutiva que siembra, aún más, de dudas el futuro del Xerez en esta temporada.
En conclusión, el Xerez sigue sin dar señales de vida y acumuló su cuarta derrota consecutiva. Además, el Xerez sigue dejándose puntos en casa y ya van 5 derrotas en Chapín. Siendo realistas, el Nástic no hizo tampoco grandes méritos para ganar el partido pero supo aprovechar los graves fallos de la zaga azulina. El centro del campo xerecista sigue sin funcionar y ello, sumado a la baja de José Mari, hace sufrir mucho al Xerez, un equipo que parece desmotivado y sin ideas. En fin, el Xerez se queda ahora décimo a 3 puntos del play off y debe empezar a sumar puntos para acabar finalmente en los puestos de promoción. Que así sea.
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