El Xerez Deportivo perdió en la mañana de ayer frente al Rayo Vallecano tras encajar un gol en el minuto 90. El conjunto de Javi López fue de más a menos, se conformó con el empate y, cómo suele ocurrir en estas ocasiones, salió perdiendo. El desgaste físico de la primera mitad pasó factura al centro del campo azulino y en la segunda mitad apenas se hilvanó una jugada. Cuando el partido parecía abocado al empate, Piti metió el gol que da a los suyos tres puntos de oro y que dejó con cara de tonto a los xerecistas.
Javi López apostó por el once esperado, con Bermejo y José Mari arriba, pero con la novedad de Edu Moya en el lateral derecho. En los primeros compases del encuentro, el Xerez fue superior a su rival. Cordero se hizo dueño del centro del campo y empezó a crear juego. El Xerez tenía la pelota, estaba cómodo en el campo y tenía al Rayo dominado pero el conjunto azulino, como en otras ocasiones, no supo transformar su superioridad en el juego en superioridad en el marcador. La ocasión más clara la tuvo Jose Mari quién estrelló un balón en el larguero tras un buen balón de Pablo Redondo.
Cuando llegábamos al ecuador del partido, el Rayo empezó a crecer en el partido y conducido por Movilla y de un peleón Aganzo, se desquitó al presión inicial azulina y se fue en busca del gol. A punto estuvo de conseguirlo a la media hora Aganzo pero su disparo desde el punto de penalty lo sacó de forma magistral Chema. El balón quedó muerto en el área pero Trejo no acertó con la portería y el balón se marchó fuera.
Con el 0-0 en el marcador, el partido llegó al descanso. La primera mitad tuvo dos partes, una fue para el Xerez y otra fue para el Rayo. Ambos equipos tuvieron oportunidades claras pero perdonaron y el marcador no se movió en los primeros 45 minutos.
El segundo periodo, fue un auténtico tostonazo. El Xerez contó con una oportunidad de la mano de Mario Bermejo a los dos minutos de la reanudación pero el delantero cántabro erró su disparo. A partir de ahí, el partido se encalló en una fea y pobre pelea por controlar el partido pero ningún equipo puso toda la carne en el asador y las ocasiones brillaron por su ausencia.
Javi López veía que su centro del campo pero, debido a las bajas, no tenía recambios en el banquillo que le convencieran. La gasolina de Cordero se agotó en el minuto 60 y el jugador lebrijano estuvo totalmente desaparecido en los 30 últimos minutos. Además, el catalán quizás se equivocara en los cambios. Quitó a Óscar Díaz por Capdevila cuando el jugador madrileño estaba siendo de los más activos. Además, su revulsivo en ataque fue Antoñito que en algo más de 12 minutos solo tocó un balón: para sacar de centro tras el gol del Rayo.
Cuando el partido moría, Piti aprovechó una serie de indecisiones en la zaga azulina para marcar El Xerez no tuvo tiempo para la reacción y el Rayo acabó llevándose tres puntos de oro que le mantiene en la lucha por el ascenso directo mientras que el Xerez desaprovecha una gran ocasión de seguir aumentando su renta respecto a sus seguidores por entrar en los puestos de play offs. La semana que viene, el equipo más en forma de la Liga, el Celta recibe a los azulinos. En Vigo, está la oportunidad perfecta de resarcirse y reivindicarse.
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